El cáncer de la glándula tiroidea ocurre en las células de dicha
glándula, que tiene forma de mariposa y está ubicada en la base del
cuello, justo debajo de la nuez de Adán. La glándula tiroidea produce
hormonas que regulan el ritmo cardíaco, la presión arterial, la
temperatura corporal y el peso.
Es posible que el cáncer de la glándula tiroidea no cause ningún
síntoma al principio. Pero a medida que crece, puede causar dolor e
hinchazón en el cuello.
Existen varios tipos de cáncer de la glándula tiroidea. Algunos
crecen muy lentamente y otros pueden ser muy agresivos. En casi todos
los casos, es posible curarse con tratamiento.
Los índices de cáncer de la glándula tiroidea parecen estar
aumentando. Algunos médicos piensan que esto se debe a que la nueva
tecnología les permite encontrar pequeños tipos de cáncer de la glándula
tiroidea que pueden no haberse encontrado en el pasado.
Síntomas
Normalmente, el cáncer de tiroides no provoca ningún signo o síntoma
en las primeras etapas. A medida que crece, puede provocar lo siguiente:
- Un bulto (nódulo) que se puede sentir a través de la piel del cuello
- Cambios en la voz, incluida una ronquera cada vez mayor
- Dificultad para tragar
- Dolor en el cuello y la garganta
- Hinchazón de ganglios linfáticos en el cuello
Causas
No se sabe con exactitud qué causa el cáncer de tiroides.
Este tipo de cáncer ocurre cuando las células de la tiroides sufren
cambios genéticos (mutaciones). Las mutaciones permiten que las células
crezcan y se multipliquen rápidamente. Además, estas células pierden la
capacidad de morir (a diferencia de las células normales). Las células
anómalas acumuladas de la tiroides forman un tumor. Las células
anormales pueden invadir el tejido cercano y pueden propagarse (hacer
metástasis) a otras partes del cuerpo.
Tipos de cáncer de tiroides
El cáncer de tiroides
se clasifica en tipos basados en los tipos de células que se encuentran
en el tumor. Su tipo se determina cuando se examina una muestra de
tejido de cáncer bajo el microscopio. El tipo de cáncer de tiroides se
tiene en cuenta para determinar el tratamiento y el pronóstico.
Algunos tipos de cáncer de tiroides son los siguientes:
- Cáncer papilar de tiroides. Este es el tipo de
cáncer de tiroides más común y surge de las células foliculares, las
cuales producen y almacenan las hormonas de la tiroides. El cáncer
papilar de tiroides puede ocurrir a cualquier edad, pero es más
frecuente en personas de 30 a 50 años. Los médicos a veces se refieren
al cáncer papilar de tiroides y al cáncer folicular de tiroides juntos
como cáncer de tiroides diferenciado.
- Cáncer folicular de tiroides. El cáncer
folicular de tiroides también surge de las células foliculares de la
tiroides. Suele afectar a personas de más de 50 años. El cáncer de
células oxifílicas es un tipo de cáncer folicular de tiroides poco común
y, en ocasiones, más agresivo.
- Cáncer anaplástico de tiroides. El cáncer
anaplástico de tiroides es un tipo raro de cáncer de tiroides que
comienza en las células foliculares. Crece rápidamente y es muy difícil
de tratar. El cáncer anaplástico de tiroides suele aparecer en adultos
de 60 años o más.
- Cáncer medular de tiroides. Este tipo de cáncer
se origina en las células tiroideas llamadas células C, las cuales
producen la hormona calcitonina. Los niveles elevados de calcitonina en
la sangre pueden indicar un cáncer medular de tiroides en una etapa muy
temprana. Existen determinados síndromes genéticos que aumentan el
riesgo de padecer cáncer medular de tiroides, aunque el vínculo genético
no es común.
- Otros tipos poco frecuentes. Otros tipos de
cáncer muy raros que comienzan en la tiroides incluyen el linfoma de
tiroides, que comienza en las células del sistema inmunitario de la
tiroides, y el sarcoma de tiroides, que comienza en las células del
tejido conectivo de la tiroides.
Factores de riesgo
Algunos de los factores que pueden aumentar el riesgo de padecer cáncer de la glándula tiroidea son los siguientes:
- Sexo femenino. El cáncer de la glándula tiroidea es más frecuente en las mujeres que en los hombres.
- Exposición a niveles altos de radiación. Los tratamientos de radioterapia en la cabeza y el cuello aumentan el riesgo de cáncer de la glándula tiroidea.
- Determinados síndromes genéticos heredados. Los
síndromes genéticos que aumentan el riesgo de cáncer de la glándula
tiroidea incluyen el cáncer medular de la glándula tiroidea familiar, la
neoplasia endocrina múltiple, el síndrome de Cowden y la poliposis
adenomatosa familiar.
Complicaciones
Cáncer de tiroides recurrente
El
cáncer de tiroides puede reaparecer, incluso después de recibir
tratamiento o de someterse a una cirugía para la extracción de la
tiroides. Esto puede ocurrir si células cancerosas microscópicas se
propagan más allá de la tiroides antes de extraerla.
El cáncer de tiroides puede reaparecer en los siguientes lugares:
- Ganglios linfáticos del cuello
- Pequeños restos de tejido tiroideo que no se extrajeron durante la cirugía
- Otras áreas del cuerpo, como los pulmones y los huesos
Es posible brindar tratamiento para el cáncer de tiroides recurrente.
El médico puede recomendar análisis de sangre o gammagrafías tiroideas
periódicos para verificar si hay signos de recurrencia del cáncer de
tiroides.
Prevención
Los médicos no saben con certeza qué
provoca la mayoría de los casos de cáncer de tiroides, por lo que no
existe manera de prevenirlo en las personas que tienen un riesgo
promedio de desarrollarlo.
Prevención en las personas con riesgo alto
Los
adultos y los niños con una mutación genética heredada que aumenta el
riesgo de cáncer medular de tiroides pueden considerar la cirugía de la
tiroides para prevenir el cáncer (tiroidectomía profiláctica). Es
recomendable que analices tus opciones con un consejero especializado en
genética, quien puede explicarte el riesgo que padeces de desarrollar
cáncer de tiroides y las opciones de tratamiento que tienes.
Fuente: Mayo Clinic